
La conocio el primer dia de su llegada y desde entonces su mirada, sus bailes, sus pensamientos y temblores se los dedico a ella. Bailaron todos los dias hasta el amanecer, se rozaron, miraron, bebieron y hablaron entre finos, humo y mujeres, pero no llegaba el momento deseado por la Estanque, que, estancada y con una mezcla de timidez y pudor, pensaba pero no actuaba.
Hoy, insultante de sensualidad me ha contado que es la primera vez que una mirada de mujer la ha dejado paralizada, pero no paraba de cantar esta cancion de la mexicana Paquita la del Barrio:
Invitame a pecar
quiero pecar contigo
no me importa pecar
si pecas tu conmigo
invitame a pecar
hasme que olvide penas
no me imoprta el lugar
llevame a donde quieras
invitame a pecar
invitame o te invito
quiero estar junto a ti
quiero sentir bonito
invitame a pecar
invitame o te invito